Figura en marrmol fundido elaborada por artesanos en portugal, representa la imagen del Angel de la paz con la hostia y el caliz que se aparecio a los pastores en Fatima antes de que se les presentara la Virgen María.
El ángel les dijo a los tres pastorcitos: "No tengan miedo soy el Ángel de la Paz. Recen conmigo, Dios mío yo creo, adoro, espero y Os amo. Os pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no Os aman".